FERNANDO PESSOA: LA MULTIPLICIDAD DEL YO

     Fernando Pessoa nació en Lisboa en 1888. Su padre murió cuando él tenía solo cinco años. Poco después, su madre se casa por poderes en segundas nupcias en 1895, con el comandante João Miguel Rosa, cónsul de Portugal en Durban y la familia se muda a la República de Sudáfrica, entonces colonia británica de Natal. En Durban recibe una educación británica, lo que le proporciona un profundo conocimiento de la lengua y literatura inglesa. En el año 1901 escribe sus primeros versos en inglés. En esa época intenta escribir novelas en inglés y se matricula en la Commercial School. Estudia allí por la noche, mientras por el día se dedica a disciplinas humanísticas. Profundiza su cultura leyendo clásicos ingleses y latinos, escribe poesía y prosa en inglés y termina con éxito sus estudios en Sudáfrica tras realizar en la Universidad el «Intermediate Examination in Arts», logrando buenos resultados.

     Dejando a su familia en Durban, regresó definitivamente a la capital portuguesa, solo, en 1905. Continúa la producción de poemas en inglés y entra en contacto con importantes escritores de la literatura portuguesa. A partir de 1908, se dedica a la traducción de correspondencia comercial. En esa profesión trabajará toda su vida, teniendo una modesta vida pública. Empezó a traducir y a escribir para las revistas de vanguardia Orpheu (1915), Atena (dirigida por él mismo, 1924) o Presença (en 1927). Su primer libro de poemas, Antinous, apareció en inglés en 1918. Su primera obra en portugués, el poema patriótico Mensagem (Mensaje), única que publicó en vida, no apareció hasta 1933. El día 30 de noviembre de 1935 muere a los 47 años, acaso por complicaciones asociadas a una cirrosis provocada por el excesivo consumo de alcohol a lo largo de su vida.

     Se considera que la gran creación estética de Pessoa fue la invención de sus “heterónimos”. Los heterónimos, a diferencia de los pseudónimos, son personalidades poéticas completas: identidades, que, en principio falsas, se vuelven verdaderas a través de su manifestación artística propia y diversa del autor original. Entre los heterónimos, el mismo Fernando Pessoa pasó a ser llamado "ortónimo", ya que era la personalidad original. Los tres heterónimos más conocidos (y también aquellos con mayor obra poética) fueron Álvaro de Campos, Ricardo Reis y Alberto Caeiro. Un cuarto heterónimo de gran importancia en la obra de Pessoa fue Bernardo Soares, autor del Livro do Desassossego (Libro del desasosiego). Bernardo es considerado un semi-heterónimo por tener muchas semejanzas con Fernando Pessoa y no poseer una personalidad muy característica ni fecha de fallecimiento.

     La obra ortónima de Pessoa (es decir, la escrita bajo el nombre propio del escritor) pasó por diferentes fases, pero que se centra básicamente en la búsqueda de un cierto patriotismo perdido, a través de una actitud sebastianista reinventada. El ortónimo fue profundamente influenciado, en varios momentos, por doctrinas religiosas como la teosofía y sociedades secretas como la masonería. La principal obra del llamado "Pessoa elemesmo" (Pessoa-él-mismo) es Mensagem, una colección de poemas sobre los grandes personajes históricos portugueses. El libro fue el único publicado en portugués en vida del autor. El ortónimo es considerado como simbolista y modernista por la evanescencia, la indefinición y la insatisfacción de su producción lírica.

     Alberto Caeiro, nacido en Lisboa, fue la mayor parte de su vida un campesino casi sin estudios formales —solo cursó la instrucción primaria—, pero es considerado el maestro entre los heterónimos, inclusive por el ortónimo. Muertos su padre y su madre, se quedó en casa de una tía-abuela, viviendo de una renta modesta. Murió de tuberculosis. También es conocido como el poeta-filósofo, pero él rechazaba ese título y pregonaba una «no filosofía». Creía que los seres simplemente son, y nada más: se irritaba con la metafísica y cualquier tipo de simbolismo de la vida. Caeiro fue descrito por el propio ortónimo (Fernando Pessoa) como un pagano. Poseía un lenguaje estético directo, concreto y simple, pero aun así bastante complejo desde el punto de vista reflexivo.

     Entre todos los heterónimos, Álvaro de Campos fue el único en manifestar fases poéticas diferentes a lo largo de su obra. Era un ingeniero homosexual de educación inglesa y origen portugués, pero siempre con la sensación de ser un extranjero en cualquier parte del mundo. Comienza su trayectoria como un decadentista influido por el Simbolismo, pero luego se adhiere al futurismo. Tras una serie de desilusiones, asume una vena nihilista, expresada en el que es considerado uno de sus poemas más conocidos e influyentes: Tabacaria.

     El heterónimo Ricardo Reis se define como latinista y monárquico. De cierta manera, simboliza la herencia clásica en la literatura occidental, expresada en la simetría, armonía, y un cierto bucolismo, con elementos epicúreos y estoicos. El fin inexorable de todos los seres vivos es una constante en su obra, clásica, depurada y disciplinada. Según Pessoa, Reis se trasladó a Brasil en protesta por la proclamación de la República en Portugal, y no se sabe el año de su muerte.

PRINCIPALES OBRAS

  • Antinous (1918), en inglés
  • Mensagem (1933)
  • El guardador de rebaños, de Alberto Caeiro
  • Odas, de Ricardo Reis
  • Poesías, de Álvaro de Campos
  • Libro del desasosiego (1982), de Bernardo Soares, en prosa, fragmentario.